En estas vacaciones de verano es muy común querer asolearse en la playa o por lo menos en la azotea de la casa. Sin embargo, en algunos casos, para lucir ese tono tostado y el bikini resalte hay personas que optan por utilizar cámaras de bronceado. Pero ¿Qué tan buenas son las camas de bronceado?
Para que sepas, las cámaras de bronceado funcionan a base de la emisión de rayos UV, la cual altera a las células de la piel para que produzcan más melanina, un pigmento que es lo que le da color a la piel.
Estar 20 minutos en una cama de bronceado es igual a estar 3 horas en la playa sin bloqueador.
A continuación, te presentamos cuáles son las consecuencias más perjudiciales para la salud el exponerse a una cámara de bronceado:
Cáncer de piel
Si usas ese tipo de aparatos desde antes de los 35 años, el riesgo que puedes tener de padecer cáncer de piel es 59% más alto que si no lo hicieras. Incluso, si lo haces antes de los 30 se eleva en un 79%.
Asimismo, el melanoma es el segundo cáncer más frecuente entre 15 y 29 años y el más frecuente entre las de 25 a 29 años, siendo el 76% de estos causados por, sí, las camas de bronceado.
Envejecimiento
Si te consideras una persona un tanto vanidosa, deberías asustarte, ya que el envejecimiento de la piel se da por las arrugas, resequedad y cambios en la pigmentación, las cuales son causadas en un 85% por la radiación UV. Con el bronceado de las cámaras ten por seguro que envejecerás más rápidamente y con efecto irreversible, además de que entre envejezca tu piel, mayor probabilidad tendrás de desarrollar cáncer.
Daño a los ojos
¿Recuerdas que cuando hay un eclipse te dicen que no veas directamente al sol porque puede dañar tu vista? Pues lo mismo ocurre con la radiación causada por las cámaras de bronceado, sólo que es 100 veces mayor a la del sol. Esto ocurre por dos motivos, el primero porque es una radiación más intensa que la del sol y el segundo porque estos rayos están mucho más cerca y caen directamente sobre tu cuerpo.
Si creías que con unos lentes oscuros es más que suficiente para evitar daños, lamentamos decirte que esto es completamente falso. Pues la misma radiación es tan intensa que no importa lo que te coloques encima para “protegerte“.
Como consecuencia de ésto, está la fotoqueratitis, que causa: lagrimeo, dolor, inflamación del párpado, disminución de la vista, y sensación de que tienes arena en los ojos. Y también las cataratas, las cuales causan daño permanente al lente que tenemos en el ojo, llevándonos a la ceguera y a pagar costosas cirugías para reparar el daño. ¡Ah! Se nos olvidaba mecionarte que también pueden producir cáncer en los ojos.
No trates de estar a la moda, no intentes verte como las celebridades, pues al fin de cuentas se trata de tu cuerpo y tu salud es la que se expone a daños irreversibles. Aunque si de bronceados seguros se trata, no hay nada que el sol, unas gafas oscuras y un buen bloqueador solar no puedan solucionar.