El amor… el amor… ¿Quién no ha estado enamorado por lo menos una vez en su vida? Pero, a pesar de que todos hemos sido flechados, ¿te has preguntado cómo es que nos enamoramos?
Muchos expertos se han encargado de descifrar cómo es que nos enamoramos y lo que encontraron fue que todo proceso de enamoramiento consta de 5 etapas, y aunque hayas creído que todos aquellos bellos sentimientos y emociones provienen del corazón, lo cierto es que en realidad la química de nuestro cerebro tiene mucho que ver con tus mariposas en el estómago. A continuación te explicamos en qué consisten estas 5 etapas del enamoramiento.
1 – De la vista, nace el amor
Cuando ves a esa persona especial, una ligera descarga eléctrica provoca que tu sistema límbico (tálamo, hipotálamo y amígdala) se encienda. Este sistema, regula tus emociones, la memoria y el hambre, además regula tus instintos sexuales. Ese contacto visual hará que comiences a sudar, principalmente en las axilas y en la entrepierna, pues ahí es donde se secretan unas pequeñas moléculas conocidas como feromonas, que harán que todo tu cuerpo se enfoque en quien haya cautivado tu mirada.
2 – No se qué me pasa
Como producto del proceso anterior resulta la liberación de feniletilamina (FEA), una sustancia capaz de suspender todas las acciones cerebrales. Así que no es coincidencia que nos sintamos despistados o distraídos, que no seamos capaces de mantener el equilibrio o coordinar ideas y movimientos. Pero no te preocupes, que el efecto de la FEA sólo dura un instante.
Tu cerebro recuperará el control secretando dopamina y norepinefrina, sustancias que iniciarán un recorrido por todo tu cuerpo. Al finalizar el viaje, el resultado son unos vasos sanguíneos más cerrados, aumento de la temperatura y de la intensidad de las respiraciones (ahí la causa de tantos suspiros); después aumentará la glucosa en la sangre, se dilatarán tus pupilas, se contraerá tu estómago y el intestino, dando como reacción final las ya famosas mariposas en el estómago.
3 – Todo contigo
Poco a poco tu cerebro regresará a la normalidad gracias a las endorfinas y las encefalinas, unas sustancias opiáceas que causan tranquilidad, calma, gozo, alegría y hasta risa (por si te preguntabas por qué eras la única persona que se reía de sus chistes). Para combatir el bajón de azúcar al que se expone tu cuerpo, se liberará la serotonina, la cual aumenta (sobre todo en las mujeres) la necesidad de comer algo dulce.
La tercera etapa del proceso de enamoramiento culmina con la aparición del péptido del amor, la oxitocina, razón por la cual tendrás la urgencia de tocar a ese alguien especial. Si logras obtener un beso, el ciclo se afianzará al intercambiar el olor y sabor, provocando que tu memoria a largo plazo lo almacene.
4 – El amor ciego
No importa si eres hombre o mujer, en la cuarta etapa del proceso de enamoramiento tu testosterona aumentará, provocando que te vuelvas más territorial (en el caso de los hombres), o que pierdas el juicio y la posibilidad de tomar decisiones coherentes (si eres mujer), y lo único que buscarás es estar más tiempo con quien hace sentir tan bien a tu cerebro.
5 – Y vivieron juntos para siempre (o quizá no)
Lamentablemente los humanos, a diferencia de otros animales, no somos capaces de secretar la cantidad necesaria del péptido de la fidelidad, mejor conocido como vasopresina. Esta sustancia (en las cantidades adecuadas) es capaz de lograr que los animales forjen un vínculo eterno con su pareja, y que en caso de fallecer uno, el otro decida suicidarse o no volver a experimentar sensaciones de enamoramiento con alguien más. Aunque los humanos secretamos esta sustancia, no lo hacemos de forma constante ni suficiente como para lograr el mismo efecto, sin embargo, nuestro cerebro no es dominado tan sólo por estas sustancias químicas, por lo que sí tenemos la capacidad de poder mantenernos con una sola pareja, claro, siempre y cuando lo deseemos.
¿En qué etapa del enamoramiento te encuentras tú?